(Meditación sobre la ley de la siembra y la cosecha)
Las siguientes frases las leí en algún sitio del internet, y me parecieron desafiantes:
“Siembras un pensamiento, cosechas una acción.
Cosechas una acción, siembras un hábito.
Siembras un hábito, cosechas un carácter.
Siembras un carácter, cosechas un destino.
Cosechas una acción, siembras un hábito.
Siembras un hábito, cosechas un carácter.
Siembras un carácter, cosechas un destino.
La siembra es opcional, la cosecha obligatoria.
Ten cuidado con lo que siembras.
Cada uno es responsable de lo que le sucede y tiene el poder de decidir lo que quiere ser.
Lo que eres hoy es el resultado de tus decisiones y elecciones en el pasado.
Lo que seas mañana será consecuencia de tus actos de hoy.
Piensa si el lugar dónde estás ahora
te lleva al sitio que deseas estar mañana”.
Ten cuidado con lo que siembras.
Cada uno es responsable de lo que le sucede y tiene el poder de decidir lo que quiere ser.
Lo que eres hoy es el resultado de tus decisiones y elecciones en el pasado.
Lo que seas mañana será consecuencia de tus actos de hoy.
Piensa si el lugar dónde estás ahora
te lleva al sitio que deseas estar mañana”.
En conlusion, no podemos escapar a las consecuencias de la cosecha, pero si tenemos el control de los que sembramos.
Determina hoy sembrar tus mejores semillas y hacerlo con fe.